4 de septiembre de 2016

Vive




Arriésgate y vive.
Como si nunca te hubieras caído.
Como si nunca te hubieran herido.
Como si fuera el primer día de tu vida o el último de tu existencia.
No mires atrás.
Los problemas se solucionan, las lágrimas se secan, las heridas se curan y el tiempo se agota.
Exprime cada momento como si no volviera a volver, porque de hecho, no vuelve.
La vida está hecha para devorarla, para no dejarse nada en el tintero, para descubrirnos a nosotros mismos.
La vida duele, pero también te sorprende.
No tengas miedo a vivir. No tengas miedo a soñar. No tengas miedo a querer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario