Otro día más, con miles de palabras que vienen
y van inundando mi cabeza y que luego van despacio
hasta las demás partes del cuerpo terminando en mis manos,
que deletrean y traducen lo que intento expresar.
He aprendido a querer a alguien por cómo es,
no por lo que pueda llegar a ser. Me has mostrado cómo se puede
querer a alguien con sus virtudes e incluso adorar sus defectos. Que me importe
más que me haga reír por tantas cosas a que sepa muchos idiomas,
que se equivoque a que lo haga todo perfecto, que se adelante
en lugar de hacer "lo correcto", que me diga lo que piensa
aunque me pueda doler a que haga que todo es precioso
y después descubrir que todo ha sido una farsa,
que hable no con palabras correctas sino con el corazón...
Todo esto lo has creado tú y no podría estar más orgullosa
porque eres la que hace que el camino sea largo y recto,
con alguna curva pero que siempre encuentre una salida.
Sucedió.una.noche#.
No hay comentarios:
Publicar un comentario